Fotografía y texto.

Silencio y palabras.

Las palabras provienen de lugares tan inciertos que a veces se convierten en intransitables.
Cuando la luz ilumina esos espacios, el silencio es el que toma el lugar de las voces. Reina algo parecido a un adormecimiento, sin tiempo, casi de ensueño, casi imperceptible, liviano, auténtico. Con pequeños ecos que guiaran pasos lejanos.

nada.

Si hubiera sabido que se trataba de interpretar silencios
hubiera callado
porque así lo sentía,

pero aquello me impulso a hablar,
a dar una forma inexistente.

Me preguntó qué había detrás de las palabras
y la respuesta fue nada.

Como un tren que se va
corro a destiempo
con las manos vacías

Qué hay detrás?
nada.

Aún así, al escuchar una antigua canción,
mis ojos toman color y una lágrima recorre mis dedos,
quizá eso sea todo y nada más.

Sí tan solo pudieras ver

y otra vez la vuelta atrás.
me despierto y veo, olvido y retomo.

Sino hubiera dicho nada,
si los pensamientos otros hubieran sido.
como si mi sombra se desprendiera,
te escuchaba nombrarme
vanamente
incesante,
como el rocío,
como la lluvia
intensa
que te nombra en la noche.

y aún vaga en mí
un nombre,
una sensación,
un deseo hecho en claves
que nunca se juntan
, se deshacen.

y te llaman
aún
con una voz débil
golpeada

que florece
ante la más tibia
luz.

...y sin querer, comienza a despertarse
y despierta.

Palabras y sentidos.

A veces es mejor arrojar las palabras, despedirlas, en vez de guardarlas como tesoros en algún lugar del interior. A veces es mejor sacarlas, ya sea con palabras, ya sea con colores, ya sea con música. Darle forma, a lo que permanece dentro o largar lo que ya no nos pertence. Quizá luego en un acto de contemplación se entiendan muchas cosas, quizá en el tiempo, quizá en el silencio.